lunes, 22 de marzo de 2010

Memorial de Luto Estudiantil


Infortunados hechos cimbraron al Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Campus Monterrey, el 19 de marzo alrededor de la 01:00. Ese viernes informaron: dos “sicarios” habían sido muertos en un enfrentamiento con el Ejército. El sábado la realidad se desdijo: eran estudiantes. Estas líneas conllevan especial memoria a nuestros dos compañeros asesinados.

La Comunidad Tecnológico de Monterrey, sentimos profundamente la pena que embarga a las familias de nuestros compañeros ultimados: Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo. Compartimos el dolor e irritación ante tan ominosos hechos que acosan a nuestra comunidad, y la ola de siniestros acaecimientos que privan en Monterrey y la nación.

Respetuosamente: los escolares de esta máxima y prestigiosa casa de estudios a nivel nacional y Latinoamérica, estamos impedidos a ser partícipes de los traspiés y opacidad de la comunicación institucional. A continuación, una breve crítica sustancial a lo ocurrido.

La refriega transcurrió en la avenida Eugenio Garza Sada y su cruce con Luis Elizondo. Allí se ubica uno de los accesos al campus. Aclaremos que por las noches algunos ingresos permanecen abiertos, puesto que la biblioteca presta servicio 24 horas, y contamos con estricta vigilancia por elementos de seguridad del Instituto día y noche. Cuestionamientos: ¿los sicarios ingresaron y escaparon por el campus?, ¿la balacera igualmente tomó lugar en su interior?

Resultó inconcebible que dos personas hayan sido abatidas al interior del campus. Quedaron sin vida “en la entrada”, indicaron los medios. El primer comunicado “tardío” divulgado por la Dirección de Comunicación y Relaciones Públicas de la Rectoría Zona Metropolitana de Monterrey, sentenció que los individuos “alcanzaron a llegar al lado de la puerta de acceso”. Y que nadie había resultado afectado.

El sábado puntualmente recibímos el segundo comunicado. Expresaba que padres de familia habían reportado la desaparición de dos alumnos. Resultó que dos estudiantes con beca de excelencia fueron reconocidos en el Semefo, asombrosamente eran las dos personas de las que antes se dijo eran “sicarios”. En este documento firma el Rector del sistema, Rafael Rangel Sostmann. Tras la inmimente equivocación, se aduce el comunicado anterior se basó en información de la PGJ, así como de “los medios”. Culmina con “una disculpa pública” y un: “me hago responsable de haber emitido información que resultó no ser correcta”.

Lo que hoy podemos llamar la crisis de marzo, es resultado de la impericia y la falta de expertise de la Dirección de Comunicación, especialmente de las autoridades institucionales y en particular del Rector. ¿Cómo es posible que hayan suministrado falaz información, y peor aún, que le basen en “los medios”?

Si era imposible ratificarle completamente, jamás debieron pronunciarse así. Hoy inquirimos: ¿cuáles fueron las condiciones reales en que nuestros compañeros perecieron?, ¿quién les asesinó?, ¿y los sicarios?, ¿qué medidas asumirá nuestra casa de estudios? Por la grandeza de nuestra Institución, el estudiandado exige respuestas fehacientes e inmediatas, proclamando este día como Memorial de Luto Estudiantil.

PD. El lunes 22 por la mañana desayunaba en el comedor El Borrego del campus. Observaba las noticias. Se anunciaba un auto balaceado a las afueras del Tec. ¿La dueña? Una señorita sentada a mi izquierda que se puso histérica al ver su vehículo en televisión. Tenía tres días que había llegado de Reynosa para estudiar aquí.

En Paz Descansen.

1 comentario:

Unknown dijo...

Comparto tu pena como ser humano. Comparto su pena como ser humano. Comparto tu opinión como ex-atec. Comparto tu preocupación como mexicano.

Hace poco más de un mes, uno de los mejores amigos de mi hermano, estudiante de Cine, 23 años, fue asesinado después de sufrir un asalto en Polanco. A pesar de haber dado lo que se le había pedido, lo mataron. Él era mitad hondureño y mitad mexicano. El Consulado de Honduras protestó y, para cubrir la ineficacia de las autoridades, la respuesta del (inhumano) Consulado mexicano fue que (el amigo) estaba metido en problemas del Narco... Preferible que se hubieran quedado callados... Te dejo el link de un artículo que, igual que tú, escribí a raíz del hecho.

Ánimo. Aunque sea por el dolor y la impotencia, pero más que nunca Estamos Unidos Mexicanos. Y no cruzamos los brazos.

http://deascomisojos.blogspot.com/2010/03/sobre-festejos.html