jueves, 6 de agosto de 2009

Cumbre de ricos en un país pobre


Se ha causado algarabía porque el presidente Barack Obama estará visitando Guadalajara, y más aun, la segunda ciudad más importante del país. Y es que, ya le tocó a la Ciudad de México, incluso también a Monterrey; pues Obama estuvo en la primera en abril, y Hillary Clinton estuvo en la capital de Nuevo León. Por eso digo, “hasta que le tocó a nuestra ciudad”.

El 9 y 10 de agosto estará no sólo Obama, sino también Stephen Harper, primer ministro canadiense, y desde luego la institucionalidad presidencial mexicana, Felipe Calderón. Entonces como verá, la reunión no es exclusiva para Obama, en relación al protocolo, aunque los reflectores se enfoquen en él. La reunión trilateral lleva por nombre Cumbre de Líderes de América del Norte, y se ha hecho saber, que la agenda estará ligada al cambio climático, uso de energías limpias, crisis económica, migración y el tema de la influenza.

Pero, ¿qué podemos esperar a ciencia cierta de tal reunión?, ¿Por qué Obama viene a México mostrando un interés peculiar?, ¿es acaso real esa “voz regional” de América del Norte de la que tanto se habla?, ¿podemos creer firmemente en esa “cooperación (recíproca)” de la que tanto se alardea? Tal vez es simplonamente que los anglosajones desean fervientemente seguir manteniendo su hegemonía a costa de países satélites pobres como México, donde con 60 o 70 dólares se paga la semana de un obrero, mientras en Estados Unidos podríamos hablar de 400 o 500 dólares semanales, por decir algo.

Desde el triunfo de Obama, el orbe se ha manejado con cierta expectativa respecto al mulato afroamericano, pero la popularidad de Obama (en descenso) es fruto de los medios de comunicación de aquél país, pues le fotografían fuera de su envergadura presidencial, como abrazando a su esposa cariñosamente, abriendo un juego deportivo, incluso tomando cerveza en un juego de baseball. Lo han convertido entonces en una celebridad y en un presidente con “super poderes”.

Desde luego que se abordará (o al menos comentará) el caso de las visas impuestas a los mexicanos para viajar a Canadá, pues un día despertaron con la noticia de que “ahora se necesita”. El gobierno canadiense lo justifica enfatizando en que esto proveerá de un mayor control sobre el particular caso de México, ya que habrá de comprobarse que las personas viajan ciertos días, que mantienen buena salud, y que no representan riesgo alguno para el país.

A grosso modo, la situación de México se ha encarecido. Por ejemplo, hoy somos más pobres, pues según reporta el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), 47.4% de los mexicanos viven en pobreza, clasificada en tres tipos (de capacidades, alimentaria y de patrimonio). Para este caso, se habla de que el número se ha incrementado en un 5% entre 2006 y 2008, según reportes de El Economista, que es aproximado a 5.1 millones de personas, que serían clasificados como en pobreza de patrimonio (ni con su ingreso satisfacen necesidades de salud, educación, alimentación, vivienda, vestido y transporte público), o alimentaria (no alcanzan a adquirir una canasta básica de alimentos ni con todo su salario).

Desde luego que existen explicaciones para un incremento, podríamos considerar entonces, el incremento en la tasa de natalidad en relación a los porcentajes obtenidos, pero también a ese voraz capitalismo y apertura comerciales que si bien, han servido para mayor competitividad y esfuerzo de los mexicanos con el exterior, también se ha demostrado una enorme desventaja al competir México con países primermundistas como Estados Unidos, los europeos, e incluso con países que han hecho uso de inversiones billonarias en términos de nuevas tecnologías, como China, donde la mano de obra es aun más barata que en nuestro país, y además les reina una dictadura.

El caso es que Obama viene nuevamente, y el discurso ya sabemos cuál es: el de mayor cooperación, mayor competitividad e integración comercial. El rostro humano lo representa en parte el nuevo gobierno estadounidense, con enfoques sociales en relación al Estado de Bienestar, lo paradójico es que “nuestros líderes”, siguen caucionando el bienestar para los barones del dinero, no así para la clase trabajadora, y ahora que tanto necesita el capitalismo de las clases subalternas, estos discursos son muy agradables.

En fin, hay mucha tela de dónde cortar, pero lo esencial es observar que hoy, se visualiza la competitividad en relación a salarios cada vez más paupérrimos, en un país donde los gobiernos sin distingos, tienden cada vez más a la apertura y cooperación recíproca inequitativa, y en ese mismo tenor al desamparo de las clases más importantes de la sociedad: las no burguesas. También, a un Estado de Bienestar que cada vez se encarece más, y se aleja de un objetivo elemental del Estado mexicano: proteger a sus ciudadanos y súbditos y propiciar el mejor de los desarrollos para sus habitantes ante las inclemencias de la vida.

Visite: www.youtube.com/joseisabeles



No hay comentarios: