LPL José Isabeles
Lo que para el arranque de campañas electorales en Jalisco y el País se antojaba “imposible”, hoy se hace cada vez más plausible, real y palpable. Tanto el dos veces candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador como Enrique Alfaro Ramírez cuentan hoy con posibilidades reales de triunfo. Habiendo comenzado ambos por debajo de las expectativas de las propias encuestadores, ya no decir de aquellas de la propia gente. En este corte nos encontramos con que las preferencias han cambiado y han emprendido un viraje contundente.
Es necesario partir de los resultados de casas encuestadoras que en lo general, mantienen ya a López Obrador en un segundo lugar, alejado apenas por unos 8-10 puntos porcentuales de Enrique Peña Nieto, y desde luego, habiendo dejado en un tercer lugar (y cayendo) a Josefina Vázquez Mota. La distancia entre los punteros se acorta paulatinamente.
Para el caso de Jalisco, son fuertes y creíbles los rumores de que Fernando Guzmán podría declinar a favor de Enrique Alfaro, además de las presiones de su propio partido para que así lo haga, y sin dejar de lado que tanto a Guzmán como a Josefina, los ‘connotados’ dirigentes panistas los han abandonado (léase Chema Mtz., Hernán Cortés, Margarita Licea… Creel, Cordero, Madero…). Guzmán dice que no se baja, pero también es sabido que el gobernador Emilio González estaría apoyando a Alfaro.
Lo que conviene a ambos gobiernos (federal y estatal), y ante el descalabro que al día se desnuda y de lo inminente que son ambas derrotas del panismo, por qué no pensar lo que ocurre por las mentes del gobernador en Jalisco y del propio Felipe Calderón. A ninguno de ellos y ante la singularidad que los une de representar al partido que echó al PRI de Jalisco y arrebató el mando de la República por primera vez en la historia, me inclino a pensar en un escenario donde la estafeta del poder pase a manos de López Obrador y Alfaro.
No concibo un contexto donde el gobernador tenga que pasar a la historia como el hombre que le entregó al PRI el gobierno del estado, habiéndose ganado hace 3 sexenios por el panista Alberto Cárdenas, estado que a la fecha se ha consolidado como bastión albiazul. Tampoco es conveniente que Calderón con la duda encima que lo ha perseguido sobre los comicios del 2006 en que se aducía fraude presidencial, pase a la historia como el presidente que le puso la banda a Enrique Peña Nieto devolviéndole el poder al PRI. En ambos casos sería indeseable aunque en su momento inevitable que entregasen el poder al PRI en clara señal de: “Tengan. No pudimos”.
El escenario ideal es aquél en que Calderón entregue el poder a la izquierda y que en Jalisco Alfaro sea gobernador.
Y aunque para muchos esto es utopía, déjenme decirles que no lo es más. Las manifestaciones anti Peña Nieto y movilizaciones estudiantiles en torno a la democratización de los medios de comunicación, tanto como ha sucedido en Jalisco al igual que la marcha del domingo en que más de 50 mil personas marchamos acompañado a Alfaro a la explanada del Hospicio Cabañas, le están mostrando al mexicano asiduo a las telenovelas y amante de la apatía, en dónde se encuentra el verdadero e incondicional apoyo.
El movimiento alfarista en Jalisco así como el Lopezobradorista han venido de menos a más, pese a la denostación pública que desde luego arreciará para ambos en días siguientes y a través de las campañas negras.
Es muy claro que en el País como en Jalisco, a punto estamos de ser parte de una nueva historia que cambiará sin titubeos el rumbo tomado. Por eso estoy seguro que no podemos ser cómplices este 1 de julio de aquellos que aparentan cambios pero solo en sus discursos. Peña deslindándose de todos (Elba Esther, Yarrington, Montiel, Salinas, Marín…), y Vázquez Mota sin nada nuevo que ofrecer.
PD. Se rumora fuerte que Canal 21 de Zacoalco realizará un debate con los candidatos de Sayula, mientras que aquí su realización se ha entorpecido desde el principio. Sería una desvergüenza que allá sí y aquí no. Ya veremos.
Twitter: @joseisabeles
www.facebook.com/isabeles
www.periodicoelguardian.com